EL FIN DE LAS BOMBILLAS TRADICIONALES

A partir de ahora, los fabricantes de bombillas tradicionales de la UE dejarán de producir lámparas incandescentes clase E (las menos eficientes). Esta paulatina retirada ha empezado ya con las bombillas de 100 vatios. En septiembre de 2010 le tocará el turno a las de más de 75 vatios y, un año después, se retirarán las que superen los 60 vatios.

Este es el primer paso de la Comisión Europea para reducir el 20% del consumo energético de los países miembro hasta 2020, una medida recogida en el Plan Europeo de Lucha contra el Cambio Climático, y que exige la eliminación de todos los tipos de lámparas de bajo rendimiento antes de 2012.

Las bombillas incandescentes gastan entre cuatro y cinco veces más energía que las de nueva generación. Con su sustitución, cada hogar ahorrará al año unos 50 euros. El cambio también beneficiará al ahorro energético, equivalente al consumo de Rumanía o al de once millones de hogares europeos-, y se dejarán de emitir unos 15 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera.

Si andas un poco perdido en este tema, pincha en este enlace dirigido especialmente a los consumidores, y verás qué equipos son los más eficientes desde el punto de vista energético.

Pero las bombillas tradicionales no son las únicas que desaparecen en pro de un sustituto más sostenible. También lo hacen las bolsas de plástico en algunos hipermercados y supermercados como Carrefour, sumándose así al Plan Nacional de Residuos, que entre otros objetivos pretende reducir a la mitad la cantidad de bolsas de plástico consumidas en el sector del comercio.

Mientras la iniciativa se incorpora al resto de establecimientos, recuerda que las bolsas de plástico se consideran envases, así que cuando no las necesites, tíralas al contenedor amarillo.